Dióxido de Titanio
Dióxido de Titanio
El dióxido de titanio (TiO₂) es un compuesto inorgánico utilizado comúnmente como blanqueador químico. Posee un sinfín de aplicaciones debido a sus características únicas, entre las que destacan su elevada blancura, su capacidad para dispersar la luz y su fuerte resistencia frente a los rayos ultravioleta (UV).
Este compuesto está presente en numerosos productos de uso cotidiano, como pinturas, textiles, cremas solares, pastas dentífricas y cosméticos.
Entre las características más importantes del dióxido de titanio se encuentran las siguientes:
➤ Blancura extrema y efecto reflectante:
Proporciona a los productos finales una blancura excepcional gracias a su capacidad para absorber los rayos ultravioleta. Además, su alta capacidad de refracción le permite dispersar la luz visible, generando un color blanco opaco, brillante y con propiedades reflectantes al aplicarse sobre una superficie, característica especialmente valorada en las cremas solares.
➤ Alta durabilidad:
El dióxido de titanio es un compuesto muy resistente a la intemperie y a la radiación UV. Mantiene su color blanco y sus propiedades reflectantes y protectoras de manera estable a lo largo del tiempo.
➤ Estabilidad química:
Presenta una baja conductividad térmica, lo que le confiere una gran estabilidad química y durabilidad en diversas condiciones.
➤ Producto multiusos:
El dióxido de titanio tiene un amplio campo de aplicación, pues se ha empleado durante varias décadas como agente blanqueador en una gran variedad de productos. Diversos estudios han demostrado que, aplicado en concentraciones de hasta el 25%, no representa riesgo alguno para la salud. Estas cualidades han permitido que el TiO₂ sea un producto de uso extensivo en casi cualquier industria.
